MI DIARIO:
HISTORIAS QUE TE HACEN PENSAR
Hoy, 3 de marzo de 2012, empezaré a escribir este diario. Mi nombre es Loreto, soy una chica un poco tímida con 16 años, mi pasión es bailar, es más llevo más de un año en una escuela de danza en Sevilla, donde vivo con mi madre y mi hermano pequeño, un niño un tanto especial.
Mi hermano se llama Ángel, yo creo que ese nombre no fue casualidad, aunque parezca que el nombre es contradictorio en algunos momentos, puesto que es un poco travieso. Es el niño más especial que puede haber entrado en mi vida, tiene 14 años, pero a pesar de eso no habla más que algunas palabras, es como… mi hermanito pequeño. En ocasiones creo que él puede ver cosas que otros, como yo, no podemos ver por nuestros propios ojos, ni podemos sentir cosas que él siente. Me encantaría que pudiera escribir un diario como el que yo estoy escribiendo ahora y así averiguar lo que él sabe y que nosotros no, sería un diario muy especial de una persona muy especial.
Suelo cuestionarme todo, y me como la cabeza hasta dar con la solución. Encuentro normalmente dos soluciones, una que es la que le parece normal a la mayoría de personas y otra por la cual me toman por loca, pero que si te pones a pensar con un poco de imaginación podría tener un poco de sentido.
Todos los días me pongo a buscar la posibilidad de que haya vida en otros planetas, e incluso que en la Tierra vivan, desde hace ya un tiempo, individuos camuflados entre los humanos provenientes de otros lugares del universo. Este tipo de respuesta es la que hace que lleguen a pensar que estoy loca.
Escucho música cada vez que razono cada una de las preguntas que me hago cada día, sobre todo estilos tranquilos, ya que me relajan y me permiten dar lo máximo de mí. También escucho otros tipos como hip hop, pop… pero con estos me distraigo demasiado y acabo bailando sin haber encontrado aún una respuesta.
La idea de escribir este diario es la mejor que se podría haber ocurrido, tanto como para desahogarme y decir lo que no soy capaz de decirle a otros, como para que cuando los extraterrestres me usen para hacer experimentos, me lleven a sus naves y me borren la memoria para no recordar nada tenga la posibilidad de recuperar algunos momentos vividos que no me gustaría que se me olvidaran nunca, que cuando tenga hijos se los pueda contar como anécdotas.